Para seguir con el tema del medioambiente, la generación de energías renovables nos pareció un mercado clave para investigar, especialmente en Latinoamérica donde el rápido desarrollo tecnológico y el clima favorable facilitan nuevas oportunidades para inversión a lo largo de la región. Para contextualizar el tema de hoy un poco más, las energías renovables o, energías limpias, hacen referencia a combustibles producidos de manera sostenible, los cuales no agregan al problema del cambio climático y proveen una solución para el futuro en el transporte además de la vida cotidiana. La crisis del COVID-19 nos mostró el potencial para un cambio acelerado e imprevisto sobre la población mundial, lo cual da otra perspectiva a la crisis medioambiental. Sin embargo, los cambios tras la pandemia son temporales, mientras los cambios asociados con el cambio climático no son los mismos y por eso hacen el tema de hoy cada vez más importante.
Antes de compartir ejemplos específicos, hay que destacar los números y, en efecto, subraya el potencial para este sector en Latinoamérica. La capacidad para energías renovables en la región en 2020 eran unos 278GW, 60% más que al comienzo de la década. Esta cifra representa el potencial increíble para inversiones en el mercado, y con una necesidad de hacernos la diferencia entre la crisis y el éxito con respecto al medioambiente, hay que seguir con el desarrollo durante esta década para aumentar la capacidad un poco más y tal vez su inversión podría cambiar nuestro camino hacia las emisiones bajas.
Con esto establecido, podemos investigar unos ejemplos de su uso en Latinoamérica. Acabábamos de mencionar el clima de la región, y, específicamente, todos los países tienen sus propias ventajas individuales, las cuales hacen la generación de otras formas de energía más rentable, por ejemplo, Chile para la energía solar o Argentina para la energía eólica. Para potenciales inversores, esa diversidad muestra un hueco grande en el mercado para buscar rendimientos grandes, no solo económicamente, sino también medioambiental. Además de esto, con un 25% del consumo total de energía de forma renovable, todavía existe potencial para aumentar el nivel de desarrollo con proyectos en Latinoamérica.
Ahora tenemos tres proyectos para compartir con el fin de representar el tipo de inversión que podrías efectuar en la región:
Uruguay - Paso de los Toros
· Biomasa
· US$2,7 mil millones de inversión
· 310MW de energía generada
Para potenciales inversores en este sector, los combustibles limpios son muy importantes con respecto a los vehículos alternativos y sostenibles, los mismos que representarán lo normal en un futuro cercano. Por eso, la inversión en la biomasa podría convertirse en una oportunidad este año.
Chile - Likana
· Termosolar
· US$2,4 mil millones de inversión
· 450MW de energía generada
Una cosa que todos aprendimos durante el último año es la necesidad de poder adaptarse y usar las situaciones imprevistas para tener un impacto positivo sobre nuestra comunidad global. El calentamiento global presenta una crisis, pero también una oportunidad para hacer lo mejor de una situación difícil. En Chile, las temperaturas más altas pueden ser usadas para generar energías limpias y evitar el uso de los combustibles, tal vez una oportunidad para una inversión que valdrá la pena investigar un poco más.
Argentina - La Deseada
· Energía eólica interior
· US$2,2 mil millones de inversión
· 900MW de energía generada
El proyecto con las proyecciones más altas con respecto a la energía generada, un hecho que, vinculado con la inversión más baja en comparación con los anteriores, presenta una inversión rentable que podría tener buenos rendimientos económicos y medioambientales.
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